Este libro nos da muchas claves sobre la atractiva literatura de Roald Dalh. A través de una serie de cuentos el autor nos pasea por su infancia. Descubrimos la admiración que sentía por una madre joven y viuda que levantó con tenacidad a su numerosa familia y el rigor de su padre, ejemplo de superación personal antes de su muerte. Descubrimos que el autor vivió durante años en los duros internados ingleses y con la capacidad narrativa que les es propia nos cuenta numerosas anécdotas que muestran como él fue víctima de una educación escolar basada en el castigo y en el miedo.
Roald Dalh nos explica entre estos relatos lo que él cree que pudo inspirarle una novela como Charlie y la fábrica de chocolate.
Me ha encantado volver a leer a este autor, al leer estos cuentos es fácil entender el mensaje positivo que se desprende de todos sus textos para adolescentes: Matilda, Charlie...su narrativa es ágil y está salpicada de descripciones que te atrapan en una época sobre la que el autor nos despierta la curiosidad. Cuando estéis un poco cansados os recomiendo esta lectura agradable para cualquier edad.
Marisa Gil, professora
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